Vinculaciones hipotecarias,
una especie “en peligro de extinción”
La firma de
una hipoteca suele venir acompañada de cláusulas o vinculaciones con las que los bancos
hacen, en muchos casos, buen negocio. Exigencias como tener que abrir una
cuenta nómina en su entidad, domiciliar algunos recibos y, otras más duras
como es contratar un seguro de hogar, de vida o planes de pensiones. Pero
algunas de esas vinculaciones tienen los días contados tras la crisis y
actualmente son poco más que “una especie en extinción”, tal y como nos explica
el responsable de idealista hipotecas, Juan Villén.
Ahora que
parece que ha pasado lo peor de la recesión en nuestro país y la banca comienza
a recuperarse, una de las prioridades de las entidades financieras es la de empezar
a dar créditos y préstamos. en este caso, las hipotecas no son una excepción y
aunque los bancos aún son bastante selectivos a la hora de dar préstamos,
“son los clientes los que empiezan a tener la sartén por el mango”, lo que
va a provocar que se flexibilicen algunas condiciones, según revela Juan Villén.
“Durante la
época de crisis hemos visto que las entidades financieras -en una situación de
cierre completo del crédito- obligaban a acatar a los clientes tipos de interés
altos y aceptar vinculaciones duras, como son por ejemplo los seguros (vida,
hogar y protección de pagos), que a pesar de ser beneficiosos, los clientes
los perciben como un gasto obligatorio importante condicionado al pago de
la hipoteca”.
No obstante,
Villén considera que desde principios de año esta tendencia está cambiado y los
bancos, “empujados por la necesidad de dar hipotecas”, están bajando
los diferenciales (ya inferiores al 2% en muchas entidades) y “la tendencia es
la de cada vez menos vinculaciones”.
En este
sentido, el primero en abrir la veda en este tipo de situaciones fue Banco Santander,
al ofrecer una hipoteca solo con vinculaciones “light” como son las de
añadir una cuenta nómina, la domiciliación de recibos y un seguro de hogar del
que además regalaban el primer año, y desvincular su préstamos a otros
productos como los seguros.
“Los bancos
se están viendo obligados a quitar vinculaciones desde el principio y están
cambiado el modelo haciendo que las vinculaciones sean de carácter opcional”. De
este modo, el responsable de idealista hipotecas prevé que en los
próximos años lo que vamos a ver es la adjudicación de préstamos con
vinculaciones light que no exijan al cliente un desembolso extraordinario, en
“una estrategia más encaminada a captar clientes para luego intentar
vincularlos a otros productos, pero siempre opcionales”.
A pesar de
lo optimista de la situación conviene no engañarse, el “gancho” de los
bancos ahora será ofrecer menos vinculaciones a costa del diferencial. De
este modo podemos encontrarnos con entidades que ofrezcan diferenciales bajos
con vinculaciones algo más fuertes y otros con diferenciales normales (sobre el
2%) con cláusulas light por eso, se recomienda que, para buscar una hipoteca,
el cliente “solicite diferentes propuestas para poder comparar y hacer una
análisis, sobre todo de las vinculaciones a futuro”. No debemos olvidar que si
firmamos cláusulas con un alto grado de compromiso hoy puede ser que en 5 años
no podamos hacer frente a todos los gastos (y hay que recordar que la media de
las hipotecas es de 25 años).
Fuente:
www.idealista.com
No hay comentarios :
Publicar un comentario